La importancia de llamar al candidato
Hace ya unos meses en los que entré a trabajar en Beabloo: una empresa de marketing Digital que combina el Big Data para entornos retail. De forma reducida: llevamos las nuevas tecnologías del mundo online al mundo offline.
Desde que entré me he dedicado a poner en orden y crear el departamento de Recursos Humanos. Dentro de mis tareas, sigo haciendo selección para atraer y mantener el mejor talento. ¡Y doy fé de que lo tenemos! La verdad es que incluso después de trabajar en InfoJobs, es la empresa en la que más auto candidaturas he recibido nunca.
Hace unos meses, alguien me hizo llegar el post de Francesc Gelida “Por favor, llamen.” Me recordó una parte de el post que escribí hace unos meses sobre las “Cosas que se deberían mejorar en los procesos de selección“.
Tras unos meses en Beabloo decidí incorporar a mi equipo a una chica para que me diera soporte en toda el área pero sobre todo en selección ya que estamos creciendo muy rápidamente. Cogí una persona con poca experiencia para que viniera con ideas frescas, me permitiera enseñarle todo aquello que creo que es bueno para el área de Recursos Humanos , me planteara retos y me aportara nuevas formas de ver el área.
El otro día hablábamos justamente de como debíamos comunicarnos con los candidatos que aplicaban a ofertas o incluso que presentaban su auto candidatura. Nosotras aplicamos lo siguiente:
– Si el candidato nos ha escrito un email y no encaja, le respondemos un email.
– Si el candidato ya ha hecho una entrevista con nosotros y debemos descartarlo, SIEMPRE llamamos y le explicamos el porqué.
– Si el candidato ha sido referenciado por algún compañero intentamos, en la medida de lo posible, hacerle una entrevista y SIEMPRE se le llama tanto si hay que descartarlo como si no.
Ayer llamé a un candidato para descartarlo, le di el feedback y llegamos a la conclusión de que no había reflejado correctamente su experiencia en su CV. Le pedí que me resumiera su CV en un email en aquellas áreas que ha desarrollado su profesión y que le servirían para el puesto. Recibimos el email y la semana que viene le veremos en persona.
El candidato merece una explicación y un buen trato por parte de la empresa. Recursos Humanos tiene su “cliente” interno al que debe cuidar. Los candidatos no dejan de ser nuestro “cliente” externo y merecen el mismo trato. ¡Quién sabe! Podrías perderte un talento potente o, en el futuro, podría ser un cliente real de tu empresa 🙂
Así que por favor, ¡llamen!.